Estas oficinas tienen como objeto el apoyo a la toma de decisiones a través del análisis prospectivo y estructural del Estado y organismo que las dirige. El Gobierno español tomó en enero de 2020 la decisión de presentar su propio proyecto, denominado Oficina Nacional de Prospectiva y Estrategia de País a Largo Plazo de España. Se trata de un órgano dirigido por el académico Diego Rubio y que depende directamente de Presidencia del Gobierno, en concreto, de su director de Gabinete, Iván Redondo.
Aunque desde marzo de 2020, la Unidad de Estudios y su Comité de Expertos debió hacer frente a los retos derivados de la COVID-19, principalmente en los planes de desescalada, el principal objetivo de la Oficina es actualmente la construcción del informe “España 2050”. Su publicación fue anunciada para octubre o noviembre del año pasado, y a pesar de que su contenido es aún desconocido, por la composición de los académicos que en él trabajan se presume una gran importancia del plano económico, tal vez con el auspicio de futuros escenarios desfavorables.
Así, al igual que para otros actores en sus áreas de influencia, estas oficinas sirven para el análisis prospectivo, pero también para mejorar la tan demandada comunicación estratégica. En el marco europeo, esto se materializa en la European Government Foresight Network, iniciativa a la que España busca sumarse. Además, representa una oportunidad para dirimir el cortoplacismo propia del decisor político, gracias al desarrollo de estrategias holísticas derivadas de la Cultura de Inteligencia que tanto interesa difundir.